A mi me reventó un motor adaptado a GLP.
Yo no volveré a arriesgarme.
El coche era un Subaru Forester y había sido adaptado a GLP por la casa oficial.
No llego a los 7.000 km.
El motor reventó mientras viajaba con mi familia dentro del coche. Afortunadamente no hubo que lamentar lesiones pero la reparación superó los 10.000 euros y la sustitución de motor por uno nuevo.
La marca siempre se negó a indicar la razón de la avería ni a dar ningún tipo de explicación, responsabilizando de soslayo a la empresa colaboradora que le hace las instalaciones (Ferrosite) y se limitó a asumir 3.000 euros como atención comercial.
Ferrosite mantuvo siempre el mas absoluto silencio y se negó a reconocer la relación de la avería con la adaptación y uso del GLP, llegando incluso a amenazarme.
Asumí yo más de 7.000 euros de la reparación y el coche siguió dando problemas.
Finalmente, y a base de mucho batallar, conseguimos llegar a una solución sin necesidad de intervención judicial y Subaru me recompró el coche (para quitarlo y quirtarme a mi de en medio).
Son muchos los que han sufrido los problemas derivados de las adaptaciones a GLP, pero los intereses económicos son monstruosos y tratan de ocultarlos a toda costa (entre otros, Repsol tiene una enorme inversión que piensa amortizar caiga quien caiga).
No seré yo quien se vuelva a montar en un coche adaptado a GLP.