Kenovy21
Capturado Activo
- Ubicación
- Fuenlabrada, Madrid, Spain
- Motor I
- dCi 90 S&S eco2
- Versión I
- Zen
- Color I
- Gris casiopea + Techo negro
La fábrica de Renault en Valladolid produce actualmente dos modelos que están teniendo un comportamiento radicalmente diferente en el mercado. Por un lado, el nuevo Renault Captur, cuyas cifras de ventas, más de 72.000 en lo que va de año, han provocado que la firma francesa dé continuidad al segundo turno seis meses después de ponerlo en marcha en Valladolid. Por el otro, el Renault Twizy, el eléctrico biplaza cuyas ventas se han desplomado entre enero y septiembre un 83 por ciento en España.
En lo que se refiere al Captur, parece que las buenas sensaciones que tenían en Renault antes del lanzamiento se han cumplido. De hecho, se apostó por el segundo turno en Valladolid muy pronto y el mercado ha respondido a esta estrategia.
Comenzó a fabricarse en febrero de este año, aunque hasta el 27 de abril no estuvo disponible en los concesionarios. Ocho meses después han salido de la cadena más de 72.000 unidades y Renault espera fabricar 45.000 más antes de fin de año, sobre todo por el acuerdo de fabricación para venderlo en un mercado tan potente como Corea bajo la marca Samsung y con el nombre QM3. En la actualidad se fabrican casi 700 vehículos al día de este modelo en Valladolid. De los pocos más de 72.000, unos 53.000 se han vendido en Europa y más de 20.000 en Francia.
Además, cabe destacar que la versión más cara del Captur es la más vendida. El coche tiene tres líneas de acabado y equipamiento. La más modesta, Life; la intermedia, Intens; y la más avanzada, Zens, que es la única en la que se incluye la pintura bitono de serie. Habitualmente, cuando se hace esta propuesta comercial, la gama más vendida es la intermedia, y la más alta suele representar un 15 por ciento del total, señalan fuentes de la compañía. Pero, en este caso, este 15 se ha convertido en un 55 por ciento. «La pintura bitono ha sido un exitazo», señalan las mismas fuentes.
En el otro extremo se sitúa el Renault Twizy. El modelo eléctrico se convirtió en el abanderado de Renault en 2012, cuando empezó a fabricarse en serie. Los primeros meses parecían invitar al optimismo, hasta el punto de que esta versión se convirtió en el coche eléctrico más vendido en España el año pasado. No obstante, todo parece haber cambiado en 2013. Las ventas del biplaza se han desplomado hasta un 83 por ciento en España entre enero y septiembre. Según los datos facilitados por la Asociación de Fabricantes de Automóviles y Camiones (Anfac), en esos nueve meses se han vendido en el mercado nacional 147 unidades, por las 867 del mismo periodo del año pasado. Nada menos que una bajada del 83 por ciento. Fuentes de Renault dicen que este descenso responde al lento ritmo de implantación de las infraestructuras en las ciudades. «Por ejemplo, en Madrid no funcionan la mitad de la mitad de los puntos de recarga», señalan. Desde la marca del rombo también dicen que «es un problema de la crisis, porque sí que hay voluntad política».
La caída también ha sido sustancial en Castilla yLeón, donde se ha pasado de 57 a ocho Twizy vendidos y en Valladolid de 22 a siete. El comportamiento de este modelo contrasta con el del vehículo eléctrico en general, cuyas ventas aumentaron en España un 77,5 por ciento al pasar de 325 coches a 577, más de la mitad de ellos en Madrid y Cataluña.
En lo que se refiere al Captur, parece que las buenas sensaciones que tenían en Renault antes del lanzamiento se han cumplido. De hecho, se apostó por el segundo turno en Valladolid muy pronto y el mercado ha respondido a esta estrategia.
Comenzó a fabricarse en febrero de este año, aunque hasta el 27 de abril no estuvo disponible en los concesionarios. Ocho meses después han salido de la cadena más de 72.000 unidades y Renault espera fabricar 45.000 más antes de fin de año, sobre todo por el acuerdo de fabricación para venderlo en un mercado tan potente como Corea bajo la marca Samsung y con el nombre QM3. En la actualidad se fabrican casi 700 vehículos al día de este modelo en Valladolid. De los pocos más de 72.000, unos 53.000 se han vendido en Europa y más de 20.000 en Francia.
Además, cabe destacar que la versión más cara del Captur es la más vendida. El coche tiene tres líneas de acabado y equipamiento. La más modesta, Life; la intermedia, Intens; y la más avanzada, Zens, que es la única en la que se incluye la pintura bitono de serie. Habitualmente, cuando se hace esta propuesta comercial, la gama más vendida es la intermedia, y la más alta suele representar un 15 por ciento del total, señalan fuentes de la compañía. Pero, en este caso, este 15 se ha convertido en un 55 por ciento. «La pintura bitono ha sido un exitazo», señalan las mismas fuentes.
En el otro extremo se sitúa el Renault Twizy. El modelo eléctrico se convirtió en el abanderado de Renault en 2012, cuando empezó a fabricarse en serie. Los primeros meses parecían invitar al optimismo, hasta el punto de que esta versión se convirtió en el coche eléctrico más vendido en España el año pasado. No obstante, todo parece haber cambiado en 2013. Las ventas del biplaza se han desplomado hasta un 83 por ciento en España entre enero y septiembre. Según los datos facilitados por la Asociación de Fabricantes de Automóviles y Camiones (Anfac), en esos nueve meses se han vendido en el mercado nacional 147 unidades, por las 867 del mismo periodo del año pasado. Nada menos que una bajada del 83 por ciento. Fuentes de Renault dicen que este descenso responde al lento ritmo de implantación de las infraestructuras en las ciudades. «Por ejemplo, en Madrid no funcionan la mitad de la mitad de los puntos de recarga», señalan. Desde la marca del rombo también dicen que «es un problema de la crisis, porque sí que hay voluntad política».
La caída también ha sido sustancial en Castilla yLeón, donde se ha pasado de 57 a ocho Twizy vendidos y en Valladolid de 22 a siete. El comportamiento de este modelo contrasta con el del vehículo eléctrico en general, cuyas ventas aumentaron en España un 77,5 por ciento al pasar de 325 coches a 577, más de la mitad de ellos en Madrid y Cataluña.
